La cantidad de ejemplares afectados varía considerablemente según el tipo de ambiente (arroyo, río, laguna o embalse), su caudal, profundidad, características limnológicas y ubicación geográfica. Escuchá la palabra del especialista Miguel Mancini en DE UNA.
Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC), a través del equipo de Miguel Mancini de la Facultad de Agronomía y Veterinaria; y del Instituto de Ciencias Veterinarias (Incivet), en colaboración con Fabián Grosman de la Universidad Nacional del Centro de la provincia de Buenos Aires, detectaron y registraron numerosos casos de mortandad de peces en la provincia de Córdoba. Estos eventos ocurrieron durante y después de la reciente ola polar que azotó la región durante el mes de julio.
La UNRC lleva varios años investigando diversas mortandades de peces, algunas de ellas graves por la cantidad de ejemplares afectados, trabajando en conjunto con otras universidades; la Fundación Río Ctalamochita; organismos estatales; clubes y referentes de distintas partes del centro de Argentina.
Impacto de las bajas temperaturas y factores ambientales
Según explicaron los investigadores, las bajas temperaturas repercuten directamente en la aparición de peces muertos. La cantidad de ejemplares afectados varía significativamente según el tipo de ambiente (arroyo, río, laguna o embalse), su caudal, profundidad, características limnológicas y ubicación geográfica.
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Un ejemplo de esta afectación directa se observó en el arroyo Colón (Buenos Aires), que el 1 de julio llegó a congelarse de orilla a orilla.