Foto: imageBROKER, Gerhard Zwerger Schoner, Cordon Press
Sobre el pico Kulhornet, en Nordland (Noruega), un anillo solar flota como una corona luminosa alrededor del Sol invernal. Este fenómeno, conocido como halo solar, transforma un paisaje ya de por sí imponente en una escena mágica, capturada con maestría por el fotógrafo Gerhard Zwerger-Schoner. Los halos son visibles en muchas partes del mundo, pero es en latitudes altas como el norte de Noruega donde resultan más frecuentes y espectaculares, especialmente durante el invierno.
Un halo solar es producto de la interacción de la luz del Sol con cristales de hielo suspendidos en nubes altas. Cuando la luz atraviesa estos cristales, se crea un fenómeno de refracción que genera un anillo brillante alrededor del Sol o, en ciertas condiciones, columnas de luz. Más allá de su belleza estética, estos fenómenos atmosféricos también tienen un valor científico al permitir a los meteorólogos anticipar cambios en las condiciones del tiempo, ya que la presencia de las nubes que facilitan estos fenómenos suele preceder la llegada de frentes cálidos o tormentas.